MENSAJE SOBRE LA MISIÓN
DEL PROFETA ENOC.
DEL PROFETA ENOC.
Félix A.
Jelinek Maldonado
16-11-19
Entre los días 13 y 14
de noviembre 2019, sentí la necesidad de
escudriñar las escrituras para escribir sobre el Apocalipsis. El
articulo lo envié luego de ser activado el
servicio de Internet, suspendido por mantenimiento durante cuatro días.
El día 15 pude abrir
el correo y encontré el mensaje de un amigo residenciado en Portugal, que me
remitía un archivo titulado REBAÑO MIO, haciéndome la pregunta
¿quién
era ENOCH? Mi amigo David, no es miembro de la iglesia y desconozco su fe
religiosa. Nuestra relación ha sido estrictamente de trabajo, pero lo he
mantenido entre mi lista de amigos, a los cuales les hago llegar mis escritos sobre
Teología. Basada en esta relación, “seguramente me hizo la pregunta”. Le
respondí, que se trata de un profeta que existió antes del Diluvio, que fue llamado a predicar el ARREPENTIMIENTO
y que fue el padre de Matusalén. Pude leer luego, que fue un gran abuelo de Noé, el Profeta que mantuvo la
vida humana sobre la tierra, obedeciendo al SEÑOR. Fue llamado para anunciar la visita de Jesucristo en el
meridiano de los tiempos a la tierra.
En la madrugada del
día 16, debido a mi tradicional insomnio, decidí continuar leyendo en la Perla
de Gran Precio el libro de Moisés, que había dejado señalado en el capítulo 6. Me sorprendí, cuando leí en el encabezamiento
del capítulo, la revelación directa que
DIOS le hizo a ENOC de predicar el evangelio del ARREPENTIMIENTO. Continúe
leyendo, que este era descendiente
directo de Adán por medio de su hijo Set. Me pregunte un tanto sorprendido: ¿qué relación tenía lo que estaba leyendo con el escrito que
había terminado el día 14 sobre la
manera de estar protegido en cuanto al apocalipsis? En ese artículo recordé el mensaje del
Profeta Nelson llamando al arrepentimiento. Abrí el escrito y encontré en la parte
final resaltado en color azul lo que había expresado:
El estado del
cuerpo convertido en un ser de luz luego
de su resurrección, le permitirá estar en la presencia y la gloria de seres
celestiales, que vendrán con Jesucristo durante el milenio, para ministrar
sobre los seres humanos que irán resucitando, hasta completar los mil años del
último milenio, antes del gran y
justo juicio final.
De inmediato lo relacione con el mensaje que me hizo llegar
David.
Se me inspiraba a completar el artículo que había escrito
sobre la manera de estar protegidos del apocalipsis, señalando que ENOC y
su pueblo, como seres trasladados por su
fidelidad y dignidad a toda prueba, cumplirán con su misión de enfrentar a las huestes de SATANAS primero en los cielos y luego en la tierra
como seres ya resucitados, para defender
y atar a satanás al inicio del milenio, para que nuestro Salvador y
Redentor Jesucristo pueda completar su obra entre su pueblo escogido.
¡REBAÑO
MÍO, HACED USO DEL PODER DE MI SANGRE
Y LLAGAS, PARA QUE PODÁIS PROTEGEROS
DE LOS ATAQUES DE LOS ESPÍRITUS
DEL MAL!
SEPTIEMBRE
23 2019 2: 30 P.M.
LLAMADO
DE JESÚS EL BUEN PASTOR A SU REBAÑO
MENSAJE A ENOCH
Mi Paz sea con vosotras,
ovejas de mi Grey. Rebaño mío, la humanidad
apartada de Mí, está cayendo en la desesperación y en
la intolerancia, los actos violentos están llegando a
extremos por la falta de Dios en el corazón de muchos
hombres. Tened mucho cuidado y sed muy prudentes en el
hablar y actuar, porque de ello dependerá vuestra
tranquilidad. Sellaos y sellad vuestros hijos, familiares,
personas y lugares, donde vais a estar en el día, antes de salir
de vuestros hogares porque espíritus
de intolerancia,
violencia y agresividad, andan sueltos haciendo correr la
sangre y trayendo muchas desgracias.Sin vuestra Armadura
Espiritual puesta, no salgáis a la calle, porque corréis el riesgo de ser atacados por
espíritus de intolerancia que moran en los cuerpos de aquellos que viven sin Dios y sin Ley.
Acordaos que el pecado y la maldad van en aumento y hacen parte de la vida de una gran
mayoría de la humanidad. Si queréis vivir en Paz, no entréis en discusiones estériles,
ni alcéis la voz, ni impongáis vuestra forma de pensar, para que no se rompa la armonía,
porque la intolerancia anda suelta y por culpa de ella, muchas desgracias y muertes
innecesarias se están presentando. Acordaos, es mejor perder una discusión, que perder un
amigo o la vida; apartaos de los hombres violentos, porque éste sólo busca hacer correr
la sangre. Respetad la opinión ajena y los derechos de los demás, para que podáis convivir
en paz y no olvidéis que el torpe y el ignorante también tienen su propia verdad.
El silencio y el respeto
son el mejor antídoto para evitar los problemas. Cuando alguien sin motivo os agreda o
intimide, selladlo con mi Sangre y con mis Llagas y el Poder de mi Sangre y Llagas,
apartará de la mente de esa persona el espíritu de intolerancia o agresividad. Rebaño mío,
haced uso del Poder de mi Sangre y Llagas, para que podáis protegeros de los
ataques de los espíritus del mal. Las grandes pruebas para mi rebaño están por comenzar y
sólo si ponéis vuestra confianza en Mí, y hacéis uso del poder de mi Sangre y Llagas, podréis
salir victoriosos. Os recuerdo nuevamente mis Palabras: La pelea no es con gente de
carne y hueso, sino contra malignas fuerzas espirituales bajadas del cielo, las cuales
tienen mando, autoridad y dominio, sobre este mundo oscuro. (Efesios 6. 12)
El Poder de mi Sangre y
Llagas, unidos al Rosario de mi Madre os protegerán, si con fe esta Armadura utilizáis;
aplicadlas sobre los espíritus malignos encarnados y las fuerzas espirituales que vagan
por los aires, para que salgáis victoriosos en las batallas de cada día. Sólo con vuestra
Armadura Espiritual puesta a mañana y noche, con el Poder de mi Sangre y Llagas y el
Rosario de mi Madre, podréis vencer las fuerzas del mal. Tened pues en cuenta estas
instrucciones rebaño mío, para que podáis repeler los ataques y engaños de los espíritus
malignos. Mi Paz os dejo, mi Paz os doy. Arrepentíos y convertíos, porque el
Reino de Dios está cerca. Vuestro Maestro, Jesús
el Buen Pastor Dad a conocer mis
mensajes a toda la humanidad, ovejas de mi Rebaño
Comentarios
Publicar un comentario