EL VELO NOS IMPIDE RECORDAR NUESTRA EXPERIENCIA ESPIRITUAL PREVIA.

EL VELO.

SABIA DECISIÓN DE NUESTRO PADRE ETERNO, PARA NO RECORDAR NUESTRA MEMORIA ESPIRITUAL  PREEXISTENTE.

Zacarías Jelinek

15-6-24

En Hebreos 9:1-9  leemos, que en el Templo de Jerusalén,  había un velo que separaba simbólicamente  la morada de nuestra existencia  terrenal del lugar santísimo o morada  de Dios. En Isaías 59:1,2,  se explica que  ello  significaba, que el hombre natural se separó voluntariamente  de Dios, su creador,  desde el mismo momento de la transgresión llamada caída de Adán y Eva, cuando decidieron no seguir el consejo de su PADRE ESPIRITUAL, de no comer del fruto prohibido. Importante entender, que no estaban todavía preparados para probar simbólicamente del generoso fruto, que la tierra organizada para la vida les ofrecía.  La oposición era necesaria para crecer tomando sus propias decisiones y desarrollar su autosuficiencia para gobernar sobre el planeta que recibía para ser poblado.

El velo implicaba mantener separado el conocimiento espiritual de su nueva experiencia terrenal, para mantener   la igualdad  entre hermanos espirituales con la misma genética humana,  con el fin de progresar y crecer independientemente como almas humanas en este Universo donde existimos.                                                                                                                               


El conocimiento preexistente que alcanzamos durante nuestro anterior estado,  es de gran valor y progreso para nuestro desarrollo futuro como hijos de ELOHIM. Pero nuestro ETERNO PADRE, como así lo reconocemos,  conociendo quienes somos y cómo actuamos de acuerdo a nuestro albedrío y conocimiento, considero sabio y prudente, que todos naciéramos en igualdad de condiciones para continuar aprendiendo en este nivel terrenal. El conocimiento se transforma en ciencia con propósitos específicos, cuando profundizamos los conceptos paso a paso;  Por esa razón, reconocemos su  omnisciencia y la sabiduría como PADRE, para poder  auto edificarnos, practicando la auto suficiencia. Nosotros nos encontramos en ese proceso muy básico, aprendiendo del  conocimiento, para poder convertirlo en ciencia, diseñar  y  dominar la materia.

Podemos observar en nuestro estado temporal, como a pesar de tener un velo,  hemos impuesto al nacer, diferencias, clases sociales, esclavitud, dependencia, imperios, poderes y dominios sobre nuestro propio género y  la riqueza natural. Podemos imaginar, lo que podría suceder de utilizar  el conocimiento preexistente a nuestro estado actual, al aplicarlo  sobre nuestros hermanos espirituales, sin pasar por la madurez necesaria, los filtros,  ciclos de aprendizaje y práctica para ganar experiencia y trabajar por el bienestar común.                         


El mundo espiritual es el resultado de la organización de las partículas cuánticas, manifestadas como energía y luz,  que coinciden todas hacia la única  gran verdad de un todo, sobre toda materia manifestada, en sus diferentes estados, formas, sistemas y propósitos. Por esta razón el hombre no logra entender, ubicar o atrapar la Física Cuántica,  como sucede con la física tradicional o convencional, donde todo tiene una  razón de ser y un proceso explicativo, que entendemos de acuerdo a nuestra limitada base conceptual.  En el mundo cuántico,  donde existe nuestro Padre Eterno, todo ha sido diseñado, organizado y ejecutado  de gloria en gloria. No existe el tiempo, el espacio, pesos, medidas, tamaños y comportamientos, solo niveles eternos de cambios y progreso. Las partículas cuánticas obedecen al poder del pensamiento,  la energía y el diseño,  que se desarrollan de las   inteligencias, siendo la mayor organizada  de ellas, la presencia de la mente espiritual de  ELOHIM, como el PADRE CREADOR.  

Su gran propósito es crear mundos sin fin, dándole a toda su progenie espiritual  la oportunidad de llegar a ser como él es. Diseñador y poblador de mundos sin fin en medio de un espacio que se  expande y se multiplica continuamente. Para ese propósito infinito, eterno e inmortal,  debemos estar preparados. Es la razón fundamental por la cual  existe un velo, para poder mantener el programa que ha sido diseñado con inteligencia y sabiduría  para todos nosotros. Cuando alcancemos el nivel esperado y necesario, el velo será retirado y podremos actuar siempre utilizando  el conocimiento y la  verdad aprendida con SABIDURÍA.

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