Porqué no recordamos nuestra vida anterior. EL VELO.

¿PORQUE NO  TENEMOS RECUERDO DE NUESTRO ESTADO ESPIRITUAL?

El velo.

Félix A. Jelinek Maldonado 23-1-19

ZACARIAS JELINEK

REVISADO 23-5-22

Nuestro PADRE ESPIRITUAL ELOHIM, conocedor de sus hijos, respetando plenamente nuestra libertad  para decidir y actuar, una vez diseñado y ejecutada la organización de esta esfera que llamamos tierra,  hizo posible que mediante cuerpos carnales organizados con elementos terrenales, sus hijos  espírituales tomarán cuerpos  sensoriales,  para continuar con el proceso de aprendizaje y desarrollo, que nos fue presentado en  concilio en los cielos, el cual la gran mayoría aceptamos. Con la finalidad de  igualar las oportunidades de aprendizaje como un PADRE JUSTO Y SABIO, considero que  no era conveniente que hiciéramos   uso  del conocimiento alcanzado durante nuestro primer estado de existencia. Para mantener la igualdad entre hermanos,  estableció una separación entre nuestra vida espiritual anterior y la terrenal, que llamamos el VELO.

Para un mejor entendimiento,  se define simbólicamente el velo, como una especie de tela o tul fino transparente, que separa nuestra memoria anterior, con la que registramos  como almas humanas al nacer en la tierra.   

El velo nos separa de la presencia   santa y sagrada de DIOS, donde  la condición de pureza y santidad  es necesaria. Nada impuro  puede  ingresar y menos morar en ese lugar. Él ha delegado en su hijo JEHOVÁ, la responsabilidad de velar por nosotros, ser nuestro guía, maestro, sanador  y redentor.  Por ello, existe el arrepentimiento, el perdón y su amorosa oferta de rescatarnos,  asumiendo todas nuestras faltas y errores durante nuestro aprendizaje. Esto nos   permitirá  regresar santos y purificados a la presencia de nuestro PADRE CELESTIAL.

El velo nos separa de nuestra condición contaminada  por doctrinas falsas y otras enseñanzas, que no tienen una acción edificadora o purificadora. Conocemos y podemos  participar no sólo de hechos inicuos  o indignos,  sino de creencias,  doctrinas  espirituales, y filosóficas falsas,  que se basan en la interpretación a medias verdades de la palabra de DIOS,   como hombres naturales  imperfectos de incipiente conocimiento, pero orgullosos de pretender saberlo todo.

 

El VELO   forma parte de  la verdad del evangelio restaurado en 1830.  Los que tienen conocimiento de la Biblia, encontrarán en  Mateo 27:51, Marcos 15:38 y Lucas  23:45,  que cuando JESUCRISTO murió en la Cruz, el Velo del templo en Jerusalén, se rasgó  o separó en dos partes. En Mateo 27:50,51 leemos: "Más Jesús, habiendo otra vez clamado a gran voz, cuando fue crucificado (la primera vez fue en el monte Getsemaní) entregó el espíritu. Y he aquí, el velo del templo se rasgó en dos pedazos.

Este hecho simbólico y a la vez real, le permitió a JESUCRISTO, consumar su sacrificio expiatorio por todos los pecados de la humanidad, regresando al mundo de los espíritus para cumplir  con su sagrada  misión universal salvadora y abrir la predicación del Evangelio en el mundo a los auto privados de libertad o encarcelados. Estos hermanos espirituales fallecidos, se encuentran en un estado de pausa,  impedidos  de actuar y seguir avanzando en su progreso hacia la perfección,  al desconocer o tener un  conocimiento muy escaso  de Jesucristo, como nuestro Salvador.   

En Hebreos 9:1-9  leemos, que en el Templo de Jerusalén,  había un velo que separaba simbólicamente  la morada de nuestra existencia  terrenal del lugar santísimo o morada  de Dios. En Isaías 59:1,2  se explica, que  ello  significaba que el hombre natural estaba separado de Dios desde el mismo momento de la caída de Adán y Eva. Para ser rescatados de esa caída, Jehová se ofreció ante  nuestro Padre Elohim. Para ello  fue apartado, ungido y consagrado  antes de  venir a la tierra a cumplir con su sagrada misión redentora.

 ¿Qué significado tiene este velo rasgado para nosotros en la actualidad? Con el sacrificio de Jesucristo como el cordero de DIOS, ya no era necesario para los judíos seguir sacrificando animales como ofrenda al Altísimo por sus pecados. Jesucristo es la ofrenda  carnal. Simbólicamente representa el cordero de Dios,  que  regresaba a la presencia de nuestro Padre Celestial después de su sacrificio universal  y su resurrección.  De esta manera abrió el camino  para la casa de Israel,  los gentiles y todos los humanos nacidos en este planeta,  que arrepentidos,  le sigan y deseen retornar a la presencia de nuestro Padre Celestial para vivir como seres exaltados. Esto   significa optar al mayor grado de gloria, luz,  gozo y verdad en el Reino Celestial, viviendo como familias  santas eternas en la presencia de Dios.

El VELO  y su relación con  la AUTOSUFICIENCIA

 La autosuficiencia es un principio  de auto edificación tanto espiritual como temporal. Por lo tanto, no está solo relacionado con auto abastecernos  físicamente con  alimentos, bienes y servicios en este mundo para nuestro bienestar temporal. Es un proceso de mejoramiento integral del alma humana,  que debemos practicar todos los días de nuestra existencia, para poder continuar atesorando conocimiento, aprendiendo de manera personal y  apropiada sin ser compelidos, mandados u obligados, para alcanzar nuestra plena libertad e independencia. Solo así,  podremos  afirmar YO SOY EL QUE SOY. Para lograrlo, se requiere que exista el velo, para igualar a todos los hijos de DIOS durante este estado de prueba y aprendizaje en su camino hacia la perfección. El velo  u olvido de nuestra memoria anterior, evita que los que han alcanzado mayor conocimiento en el mundo espiritual preexistente, puedan durante su proceso de prueba temporal, sacar ventaja o tener dominio sobre sus hermanos. Pese a ello,  el hombre libre de actuar y alejado de DIOS,  en este estado terrenal,  ejerce injusto poder y dominio sobre sus hermanos.  Ver D.C. 121: 34-40. El ejemplo  de ello  lo conocimos, cuando LUCIFER como un espíritu muy avanzado, propuso su plan de control y dominio sobre todos los humanos, en contraparte al plan de JEHOVA  que aceptamos al venir a la tierra para ganar experiencia, conocimiento y ser probados en todas las cosas.