Juicio a Jesús de Nazaret EL CRISTO.
Félix Jelinek Maldonado
10-4-20
Domingo de Ramos. JESÚS entra en un pollino a Jerusalén como el cordero de DIOS y no sobre un corcel con espada en mano para liberar a los judíos de los romanos.,
LUNES. JESÚS restituye la vida, a Lázaro, no lo resucita, pues luego Lázaro murió más viejo. Expulsa a los mercaderes del templo, porque siendo un lugar de oración. robaban a la gente, con sus ofertas.
MARTES. JESÚS anuncia la traición de Judas, sin mencionar su nombre y Pedro su discípulo más cercano que le había sido fiel, lo niega tres veces.
MIERCOLES. Judas Iscariote acuerda con el Sanedrín traicionar a JESÚS por treinta monedas de plata. Judas se ahorca, cuando tuvo conocimiento, que su traición había ocasionado la muerte de Jesús, lo cual no podía ocurrir de acuerdo la ley Judía. Engaño a Jesús y le pagaron con la misma moneda. Esa fue la razón de haberse colgado de una rama por remordimiento.
JUEVES. JESÚS lava los pies a sus discípulos, manifestando humildad, igualdad, servicio y amor hacia su semejante. Toman la última cena y enseña cómo debe ser recordado. Ora en el Getsemaní ofreciéndose en sacrificio para redimir nuestros pecados. Brota sangre por sus poros, lo cual indica que su sufrimiento era mayor espiritualmente que el sacrificio físico en la cruz. Se deja arrestar en paz, sin oponerse y sana al Centurión romano herido por la mano de Pedro.
VIERNES. JESÚS preso es interrogado y acusado ante Caifas. Luego es llevado ante Pilatos. Juzgado, azotado, coronado con espinas. Es crucificado en la cruz y sepultado. Era la manera de apresurar su muerte para complacer a los judíos ante el día de reposo que guardaban,
SABADO. El cuerpo de Jesús permanece en el sepulcro. Su espíritu visita el mundo de los espíritus cautivos al otro lado del velo. Entrega las llaves para predicar allí el evangelio a todos los cautivos de buen corazón.
DOMINGO de Resurrección. Jesús Es encontrado por María fuera del sepulcro, vence la muerte, retomando su cuerpo físico. Se reúne con sus apóstoles en Jerusalén y les entrega el Espíritu Santo. Se traslada a las américas y restablece su Iglesia, llamando a doce discípulos en el año 34-35 D.C según el calendario de los nefitas.
Se estima que la muerte de JESÚS ocurrió el día 7 de abril del año 30 de nuestra era de acuerdo al calendario Romano. Entregó su espíritu entre las 3 "llamada la hora nona" y las 6 de la tarde, conforme a la puesta de sol de aquel día viernes.
Durante la interpelación en el Sanedrín, Caifás busca acusar a Jesús con base al derecho romano, pero Pilatos le dice: "prendedlo vosotros mismos, y juzgadle según vuestra ley"a los cual Caifas contesta" no nos está permitido matar a nadie.
En Jerusalen David construyo el Templo, Mahoma se fue a los cielos y Jesús el hijo de Dios, nuestro Salvador y Redentor fue crucificado, lo cual nos abrió la puerta para recobrar nuestra inmortalidad.
El territorio de Judea estaba bajo la administración de Roma y la justicia correspondía a las autoridades locales. El procurador o gobernador impuesto por Roma, actuaba de forma supletoria, respetando las costumbres y las autoridades judías. Sólo intervenían cuando el pueblo lo requería, como en efecto ocurrió, instigados por los propios sacerdotes Judíos de la misma tribu de Jesús.
Acusaciones ante el sanedrín Judío.
La noche en que fue arrestado, Jesús fue llevado ante la asamblea de los líderes religiosos llamada Sanedrín (Juan 18:19-24; Mateo 26:57). Después de esto, fue llevado ante Pilato, el gobernador romano (Juan 18:23), enviado a Herodes (Lucas 23:7), y llevado nuevamente de regreso a Pilato (Lucas 23:11-12), quien finalmente lo sentenció a morir.
Violaciones en estos juicios desde la perspectiva de la ley judía:
1. Ningún juicio debía llevarse a cabo durante alguna celebración, y Jesús fue juzgado durante la Pascua.
2. Cada miembro de la corte del sanedrín, debía votar individualmente para condenar o absolver, pero Jesús fue condenado por una gritería de protestas y desaprobaciones.
3. Si se condenaba a la pena de muerte, debía pasar una noche antes de que la sentencia fuera llevada a cabo; sin embargo, solo pasaron unas cuantas horas antes de que Jesús fuera puesto en la cruz.
4. Los judíos no tenían autoridad para ejecutar a nadie, sin embargo, se las ingeniaron para manipular a los romanos y ejecutar a Jesús.
5. Ningún juicio debía llevarse a cabo por la noche, pero este juicio se hizo antes del amanecer.
6. Se debía proporcionar al acusado consejo y representación, pero Jesús no tuvo ninguna de los dos.
7. No debían hacerse preguntas de auto-incriminación al acusado, pero a Jesús se le preguntó si Él era el Cristo, para obtener su confesión.
La acusación mayor fue de Blasfemia, que sus palabras hacia Dios eran irreverentes, insultantes y ofensivas, cuando Jesús enseñaba, que era el hijo de Dios y eso no podían aceptarlo la dirigencia Judía. En Levítico se lee: quien blasfemare el nombre de Yavé, será castigado con la muerte. La pena de muerte debía ser aprobada por la autoridad romana. Por eso los judíos para evitar la lapidación, lo llevaron ante Pilatos buscando la sentencia de muerte que lograron.
Acusaciones ante los romanos.
Los juicios ante las autoridades romanas comenzaron con Poncio Pilato (Juan 18:23) después que Jesús había sido golpeado. Los cargos llevados contra Él eran muy diferentes a los cargos de sus juicios religiosos. Él fue acusado de incitar a la gente a una revuelta, sugiriendo al pueblo no pagar impuestos, y clamando ser un rey. El prefecto o gobernador Pilatos, no encontró razón para condenar a Jesús a la muerte; así que lo envió al Rey Herodes (Lucas 23:7). Herodes ridiculizó a Jesús, pero queriendo evitar la responsabilidad política, lo envió de regreso a Pilato (Lucas 23:11-12). Este era el último juicio, por lo que Pilato mandó azotar a Jesús, tratando de aplacar la animosidad de los judíos. La flagelación judía era un castigo terrible y posiblemente consistía de 39 latigazos. En un esfuerzo final por soltar a Jesús, Pilato ofreció que el prisionero Barrabás fuera crucificado y Jesús liberado, pero fue en vano. La turba gritó que Barrabás fuera liberado y Jesús crucificado. Pilato les concedió su demanda a los Judios y les entregó a Jesús (Lucas 23:25). Jesús, el hombre bueno, el maestro, caritativo, manso humilde, ante la presión de los líderes judíos, fue condenado y sentenciado a morir por crucifixión. Poncio Pilatos entendió que Jesús no faltó al emperador romano, pero la presión popular instigada por la dirigencia Judía, llevo a Pilatos a complacer a los judíos para mantener la paz entre el pueblo sometido, condenando a muerte a Jesús. Se lavó las manos en señal, de declinar su responsabilidad, dejando la decisión final en manos de las autoridades judías.
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