LOS  ZOMBI MODERNO Y LA BRUJERÍA.

Félix A. Jelinek Maldonado
5-7-19

La palabra  Zombi deriva de la práctica del VUDÜ, que llego a las américas traída    por los africanos en el siglo 16, 17 y 18, que eran esclavizados hasta morir. En su sufrimiento e impotencia ante sus  crueles amos blancos, realizaban ritos en secreto, que incluían envenenar poco a poco  a quienes los explotaban y abusaban de ellos. Las cocineras por lo general eran las esclavas negras, lo cual les facilitaba incorporar en las bebidas y alimentos sus brebajes de plantas y flores con  vísceras de peces  seleccionados. Los efectos no eran de inmediato, pero cumplían lentamente  en silencio su cometido  de  enfermar y someter a sus victimarios blancos explotadores.
El Antropólogo y médico forense Philippe Charlier, investigo a los Zombis, determinando que eran personas que premeditadamente fueron envenenas, siendo llevados a un estado Cataléptico, o de muerte aparente. Eran sepultados y  esa misma noche en secreto y utilizando ceremonias intimidantes, desenterraban los cuerpos previamente  preparados para que continuaran viviendo. Su cerebro sufría daños irreparables, perdiendo estas personas en mayor o menor grado  su voluntad. Luego  obedecían inconscientemente  a quienes los alimentaban, manteniendo  así su poder y control sobre ellos. La ley obligo a que esta práctica fuera sancionada, evitando la simulación de entierros, pero el envenenamiento y la brujería  continua siendo una práctica satánica   en el Caribe, Venezuela  y nuestro  continente.
Se obtiene un compuesto a base de Tetradotoxina, un polvo de color blanco que afecta a las neuronas del cerebro. A esto   se le suma el privar de la sal continuamente a la víctima, para incrementar   el daño cerebral y afectar  la voluntad. Esta práctica comenzó a ser utilizada en Venezuela  por el hampa,  para someter a sus víctimas, violarlas y robarlas. Algunos la asocian con la Burundanga o escopolamina, que afecta la voluntad de las personas y estas obedecen las instrucciones que les son dadas.
Un Zombi social o moderno, es aquella persona que  viva, obedece ciegamente a la persona que  ha  ordenado o efectuado el trabajo, para dominarlo  y tener el  control. Se comenta en la investigación, que algunas suegras practicaban estos ritos para dominar o controlar a sus yernos.  Otras  como esposas,  igualmente lo hacían,  sobre sus esposos, para castigarlos o evitar que fueran engañadas. En algunos ritos dependiendo del llamado trabajo del brujo,  se fuma tabaco y hasta se puede llegar a  beber sangre de animales sacrificados, creyendo que con ello  se logra fortaleza, protección o que los  malos deseos  a la distancia se cumplan.  Por lo general estos  malos deseos se revierten.
Se trata de mucha ignorancia y  toda una lucha   entre las fuerzas del bien y las del mal. La primera  predicando  la Resurrección a la vida de los muertos, el libre albedrio, la libertad de las personas, el sacrificio expiatorio y  la Santa Cena que enseño  JESUCRISTO en su Evangelio. La segunda, tratando de burlar todo el plan de salvación y redención.

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