UNIVERSO EN DESARROLLO

Y EL  HOMBRE APRENDIENDO.

Félix A. Jelinek Maldonado.
6-6-08

Podemos construir un mapa astrofísico muy pequeño y aproximado, de una pequeña parte del Universo, en base al conocimiento  logrado por el hombre hasta ahora, lo cual es un privilegio para los que vivimos en esta época. Pero sigue siendo  imposible definir su tamaño,  forma y peso. Los científicos de la NASA, a través de la observación de la llamada radiación cósmica de fondo, descubierta en 1964,  permite predecir que el Big Bang fue producto del calentamiento extremo de la materia y la energía, convertida en una gran sopa, que hizo explosión, lo cual dio inicio a la expansión del Universo. Este hecho permitió la formación de los átomos y libero la radiación e forma de luz, cuya variación en sus colores es posible en la medida que el Universo se expande, enfriándose, al alejarse  de su punto de inicio  ó de   la mega temperatura inicial. Esto, permite a  los científicos calcular la edad del Universo, en 13.700 millones de años, con un porcentaje de error del 1%.

El hombre ha venido comprendiendo y comprobando, que los mismos elementos y leyes que existen en la tierra, existen en el Universo-Espacio y qué estos, son más o menos abundantes y  ejercen mayor ó menor influencia sobre otros, dependiendo de los diferentes niveles y estados en que se manifiesta la materia, que  viaja y se transforma de manera permanente  en el Universo.

Recién se acepta mayoritariamente en el mundo científico,  la teoría   del Big Bam (y se habla como consecuencia de este punto de  inicio, de la expansión del Universo) Se predice que eventualmente este,  podría a llegar a un ciclo terminal ó final, donde entraría en implosión, al reencontrarse con su punto de origen. Esto sucedería de existir un límite para   la sustancia  ó energía oscura, ó tener un fin ó limite el espacio donde la materia se manifiesta, viaja y se transforma.
Algunos científicos, se atreven a realizar cálculos tomando como centro ó  punto de referencia  la tierra, trazando la mirada hacia la profundidad del espacio, hasta el lugar donde  los telescopios espaciales modernos,  le permiten penetrar. En base  a ello,  calculan una distancia de 46.500 millones de años luz. Otros se atreven a calcular su extensión entre 93 y 180 billones de años luz. Como se puede observar el desconocimiento en esta materia, permite estos cálculos con  diferencias abismales.
Entendemos como años luz, la distancia que esta recorre en un año, viajando a 300.000km/seg. Para una mejor comprensión de esa distancia, multiplíquese esa cifra por el número de seg. /año.  Por ejemplo de apagarse el Sol, su último rayo de luz tardaría 8 segundos en llegar a la tierra (8 x 300.000 Km.  =      ) y esta sería la distancia que nos separa del astro más cercano que tiene nuestra tierra y además  considerado como una estrella enana entre los millones de soles que existen en nuestra galaxia, existiendo millones de soles en el Universo aún no visibles para el hombre.
En todo caso no existe a ciencia cierta, la manera de realizar cálculos más  acertados, por cuanto aun  se desconoce si el espacio es finito ó infinito. Por ahora solo existen cálculos basados en nuestro Universo visible, que permiten calcular por ejemplo: la materia condensada que existe en un 0.03%.  Materia estelar o.5%. Partículas sin masa 0.3%. Materia oscura 25% y energía oscura un 75%.  Estos valores han sido calculados, en base a las observaciones efectuadas, repito con los telescopios espaciales modernos. Pero la realidad es que si observáramos desde una altura determinada, que nos permitiera abarcar toda la superficie del  inmenso desierto del Sahara  y tomáramos una piedrecilla de arena de el, esa partícula de arena representaría lo que podría ser la tierra en medio de esa basta extensión inmedible que es el Universo. Dentro de esa piedrecilla de arena estaría el hombre como un átomo,  que ni siquiera podría ser una referencia exacta ó aproximada, al comparar su tamaño con el Universo cuya dimensión desconocemos.
Esto nos da una idea de lo infinitamente pequeños que somos, pero a la vez contrasta con el enorme potencial que tenemos como seres humanos y el inmenso poder que podemos llegar a desarrollar producto del conocimiento y del aprendizaje. Esa minúscula partícula atómica casi inexistente,  es capaz de entender el Universo del cual forma parte, ubicarse en él, viajar precariamente, acelerar procesos físico-químicos, detener otros, destruir, modificar, multiplicar y hasta destruir la vida en su propio planeta.

El hombre es el único animal que responde a realidades producto de su capacidad de aprender cosas y enfrentarse a ellas. A esto le llamamos inteligencia.  El resto de los  animales solo reacciona a estímulos y resuelve su vida. A esto llamamos instinto. El hombre por el contrario, se pregunta, investiga, responde y es capaz de proyectar su vida. Por esta condición el hombre estudia el Universo, lo escudriña minuciosamente y  trata de salir del planeta que lo ata a su pasado, y lo mantiene prisionero, para habitar y enfrentar otras realidades en  otros mundos. El hombre es un incansable explorador, y que cosa tan maravillosa que exista el Universo, para que pueda cumplir con esa motivación que ha recibido de la propia materia organizada que lo ha conformado.
Por esta razón tan especial  y única en la especie animal, somos capaces de pensar y proyectar nuestra imaginación en ese misterioso,  maravilloso e infinito Universo, que esta allí, retándonos e invitándonos  en silencio  a conocerlo. Ese silencio producto de las enormes distancias que nos separan de las galaxias, soles y mundos en formación en plena actividad y de alto riesgo para la vida humana, que ha permitido mantener una seguridad relativa, para que nuestra especie y la vida en nuestro planeta pudiera  evolucionar hasta lo que es hoy.
Esta condición nos hace pensar que tenemos no solo  un gran valor para crear, pensar, proyectarnos y alcanzar las estrellas, sino que realmente como especie, podemos ser  la máxima creación u organización de la materia,  producto de millones de años de evolución de un Universo inmensamente dinámico, donde hemos surgido luego de la gran sopa, que dio origen al Big Bam  y este a su vez a todo lo que existe. Nuestra ignorancia acaba y destruye en segundos, con ese largo proceso de miles de años para que surgiera  la vida, al quitarle  la vida a nuestros semejantes, mediante el robo, el asesinato, las guerras, torturas, las ejecuciones legales, etc etc.

Ese hombre maravilloso que somos, apenas utiliza una diez milésima (0.0001 parte) del potencial de su cerebro. Lo demás permanece dormido, esperando ser activado o estimulado con información útil y necesaria para el progreso como especie. Sin embargo  la mayoría de los cerebros humanos o no se usan,  ó están llenos de información inútil, no productiva, que algunos califican de basura ó con conceptos simplistas y pasajeros sin  trascendencia alguna, alimentados por una sociedad enferma consumista que lo aleja de fines más altruistas, convirtiéndolos en maquinas consumidoras, permanente motivados y estimulados por el monstruo capitalista, que devora todo a su paso y esta convirtiendo este planeta en un basurero de desperdicios creados para saciar el afán de lucro de unos pocos. Para colmo estamos contaminando el espacio inmediato a la tierra,  convirtiéndolo en un gran basurero en movimiento orbital, cuya gravedad de la tierra atrae  los desperdicios, que   son quemados afortunadamente al ingresar a nuestra atmósfera.
Me imagino y razono entonces,  que no siendo entonces en tamaño, ni una minúscula partícula de arena, podemos acaso pensar que:
¿Somos los únicos seres humanos en  un Universo poblado de millones de planetas, soles, galaxias? ¡Que es acaso imposible que otros seres hayan aparecido antes que nosotros, hayan evolucionado de tal manera, que se hayan convertido en Dioses, entendiendo este oficio, como aquellos que han alcanzado altos niveles de  conocimiento y que probablemente hacen mejor uso de sus potenciales cerebros, como sucederá con el hombre: ¡de no acabar con la vida planetaria y mantenerse  sabiamente aprendiendo en el planeta tierra!
Acaso somos tan engreídos en creer que: ¿si desaparece el hombre en la tierra, desaparece el hombre en el Universo?

Pienso que existe necesariamente una preexistencia  que antecede a la materia manifestada y que el cuerpo físico es un complemento necesario de trabajo para fijar el aprendizaje y poder actuar en un Universo donde la materia se manifiesta, actúa y responde a leyes. Pienso igualmente que existe otro tipo de materia, otras leyes que aun desconocemos y que en su momento, de ganarnos la  calificación por otros seres más evolucionados en su inteligencia y conocimiento,  que nos preserven y esto nos permita   vencer la muerte, trasladarnos,  dominar las distancias inalcanzables y entonces poder explorar, visitar a voluntad otros mundos, para continuar con nuestro desarrollo, libres de la inmensa contaminación que generamos y que nos acompaña con nuestra sola presencia, producto de la ignorancia y el bajo  nivel de conocimiento que hemos alcanzado.

Con frecuencia escuchamos que la tierra es nuestra nave espacial, que viajamos por el espacio a riesgo de colisiones de manera permanente. En ella se produce de manera natural todo lo necesario para mantener la vida. No hay que reciclar el orín para tomar agua y los excrementos humanos para producir  alimento para los viajeros espaciales confinados en las micro naves que lanzamos al espacio.  Nuestra nave espacial tiene cientos de comandantes que obedecen a manuales diferentes, tripulantes y pasajeros, que no se ponen de acuerdo, que pelean, se matan entre si, contaminan su hábitat, hablan diferentes lenguas, se critican, agreden de todas las formas posibles, y desconocen para colmo el plan de vuelo y el destino final del hombre. El lugar de destino es interpretado de variadas formas. Los tripulantes se multiplican sin ninguna planificación, el alimento escasea, el agua potable se acaba La nave tierra y su carga humana enferma, llena de conflictos, se desplaza con rumbo incierto en permanente peligro de ser impactada por un meteorito ó cometa.

La presencia de Dioses en el Universo es altamente probable. Creo que somos producto de su inmenso conocimiento, pero el buen uso de ese  conocimiento logrado, se convierte en sabiduría; de allí que existe para nuestro mundo todo un plan programado por seres más avanzados que nosotros, condición que el mismo hombre ira modificando en la medida que haga buen uso de su conocimiento beneficiando y compartiendo con todo lo que lo rodea de manera gratuita y no solo comportándose como la única especie que le ha dado valores a los elementos de la naturaleza que se encuentran para el beneficio de todos y no solo  para sus fines personales.

La muerte puede ser un limite programado por seres que entienden que es contraproducente alargar la  vida de nuestra especie, mientras existan  personas egoístas,  dictadores, criminales de guerra, capitalistas, que pueden comprar con dinero el conocimiento para perpetuar sus malos hábitos y costumbres   para sus fines personales, olvidándose que somos seres planetarios, universales en igualdad de condiciones, cuyo propósito fundamental  es organizar otros mundos y poblarlos.

Pensar en el inmenso poder que podemos alcanzar, me hace razonar que existe un maravilloso plan de desarrollo para con nosotros. Pero ese desarrollo en plena libertad, dependerá por un principio Universal siempre del hombre.  Por ahora solo basta ver lo que somos como sociedad para darnos cuenta del alto grado de ignorancia y mediocridad que existe. Guerras, enfermedades, fronteras, himnos, banderas, contaminación, odios, falsos liderazgos, partidos políticos, competencias con ganadores y perdedores, culto al sexo, vicios, drogas, crímenes a la vida, robos, violadores, estafas, miseria, pobreza, indigencia, depredación, demanda y oferta, compra y venta etc., etc., etc. Son indicativos de que existe un gran desperdicio en el uso del precioso tiempo del cual disponemos. El afán de dinero y el sistema capitalista imperante, se convierten en el mayor freno para avanzar en el verdadero propósito que tiene el ser humano, pues la tecnología tiene un alto costo innecesariamente creado por el sistema imperante, los mercados creados deben consumir las existencias de lo pasado  ó producido, la inversión social se traduce como poco importante, el capital ó recursos humanos se consideran como pasivos y el hombre finalmente trabaja para el beneficio de elites de privilegiados ó individualidades y no para lograr la plena felicidad del hombre y su realización como especie de valor incalculable. Afortunadamente, algunos trabajan para lograr un hombre mejor y como consecuencia de que formamos parte de un plan de desarrollo en el Universo, siento que estamos siendo observados desde otros planetas habitados. Jesús fue uno de esos seres que ya nos visito proveniente de otro mundo en el meridiano de los tiempos y que continua  observando nuestro comportamiento, luego de  dejarnos su propuesta de vida,   evangelio ó instructivos, para corregir el rumbo equivocado que seguía la humanidad.
Millones se siguen llamando cristianos pero  actúan hipócritamente y de manera ignorante, convencidos de que trabajan para el bien común.  La realidad es que  están apartados años luz de lo que este maestro Universal Jesús enseño. Otros con  creencias religiosas manipuladas,   adecuadas al interés  político social y económico ó siguiendo tradiciones y costumbres que se quedaron en el pasado,  igualmente están sumergidos en la ignorancia y alejados de la misma manera,   de la verdadera razón del ser universal, que nos es otro que lograr la felicidad y el progreso espiritual de todos los seres humanos embarcados en esta nave tierra.  La cizaña  ó la mala hierba crecerá junto al trigo hasta de que se produzca la cosecha. Así lo señaló Jesús durante sus predicas a sus discípulos. Es necesaria la oposición para poder avanzar, edificar y fortalecer al hombre en su espíritu, para que unido al cuerpo forme  el alma, pueda vencer la materia y trasladarse en el Universo, tal y como lo ha logrado Jesús cuando nos visito en espíritu y tomo un cuerpo físico para poder actuar en esta esfera.
Nota:
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