LA  MISERICORDIA Y LA JUSTICIA

 Félix Jelinek
Mayo -2011

El amor que siente   nuestro PADRE ESPIRITUAL  CELESTIAL por todos sus hijos , se manifiesta de manera muy clara y precisa en la semejanza que tenemos con EL. (Genesis 1:26) . En  la naturaleza que nos alimenta, sostiene y permite la   vida, en la flora y fauna que han sido diseñadas para nuestra compañía y solaz. La mayor manifestación de su amor, la encontramos  en el diseño de  su PLAN DE REDENCIÓN Y SALVACIÓN, para que podamos  retornar a su presencia luego de pasar por este estado de desarrollo  y en la entrega  que hizo de su hijo   primogenito JEHOVA, llamado JESÚS EL CRISTO, mediante su SACRIFICIO EXPIATORIO y sus maravillosas enseñanzas en el EVANGELIO.
Como un amoroso Padre:
·         Preparo,  organizo y nos entrego un hermoso  planeta por casa, debidamente equipado y amueblado con todo lo que necesitamos. (La tierra)
·         Nos entrego la historia de nuestro origen espiritual, un plan de desarrollo, nos dio un cuerpo con  vida terrenal y la posibilidad de organizar familias. (La Biblia)
·         Nos entrego un modelo de organización para crecer unidos y para servirnos y amarnos mutuamente. (La Iglesia).
·         Activo  un plan de contingencia para mantenernos en el rumbo correcto de regreso a su morada.  (El Evangelio y su restauración)
·         Nos envió a su amado hijo como  guia,  maestro y ayuda permanente para mantenernos orientados, quien entrego su vida  y expidió nuestras faltas, para rescatarnos de la muerte temporal. (Jesucristo su muerte y resurrección).
·         Nos dejo ayuda idonea espiritual como el vinculo correcto con ELLOS a seguir ante la permanente oposición, para ser utilizada ante la ausencia del maestro.  (El Espiritu Santo)
·         Nos dejo un compendio de libros como  instrucciones, que se mantiene actualizado mediante la revelación abierta, mientras estemos alejados de nuestra morada en los cielos.(Las escrituras).
·         Todo esto fue  pensado, razonado y preparado, para darnos la oportunidad de ser como EL es, ofreciendonos su maxima gloria LA EXALTACIÓN, con la plena libertad de escoger si lo deseamos o no.

¿No demuestran estos hechos que tenemos un PADRE CELESTIAL que nos ama?

¿Qué Padre terrenal con su conocimiento actual, es capaz de desarrollar un plan semejante para sus hijos?

El Amor de DIOS, se expresa en el sincero y firme deseo del querer  compartir y entregar todo el conocimiento, poder gloria, felicidad y bienestar que El a logrado, ofreciendonos el estado de mayor gloria, como lo es la EXALTACIÓN.  Ese estado es real, en el podremos alcanzar  la mayor suma de felicidad y gloria posible, llegando a ser  ser como nuestro PADRE es,   viviendo en su presencia y sociedad, como famlias celestiales.

Para continuar con este  maravilloso proceso de desarrollo como almas vivientes. (Genesis 2:7)  se hizo necesario   pasar del estado espiritual  preexistente, al  estado físico temporal, para lo cual era necesario tomar un cuerpo carnal. Mediante este instrumento integrado al espiritu,  podemos  fijar, sentir y experimentar  el conocimiento adquirido en la preexistencia y continuar en nuestro progreso hacia otras eternidades.

 Nuestro Padre Celestial por muy lejano que nos parezca y hasta imposible para otros  de que exista,  ordeno fueramos hechos a su imagen y semejanza, una vez que la tierra, fue preparada y organizada, para que pudieramos nacer, vivir, trabajar, proteger, comprender y desarrollarnos en ella, en un segundo plano de nuestra existencia. (Genesis 2:15).

Su  plan de Exaltación, se vio frenado, cuando nuestros primeros padres terrenales Adán y Eva, comieron simbolicamente de la fruta del árbol prohibido, ejerciendo su libre albedrio. Este proceso de inducción para que el hombre tomara sus propias decisiones,   se considera una bendición en la revelación moderna, pese a que separaba a  nuestros primeros padres  de la presencia de Dios. Podemos observar que para ser completamente libres,  actuar y poder crecer, era necesario separarnos de nuestros Padres Celestiales. Se puede pensar, que los propositos de DIOS para con sus hijos,  pudieran regresar como seres inmortales exaltados, se vieran afectados, por la decisión tomada por Adán, pero  gracias a su omnicencia y sabiduría, nuestro PADRE  tenía dispuesto un plan de  rescate o redención. La  llamada caida, o transgreción, ante la necesidad de tener que  elegir por la enseñanza recibida de Dios, una vez que nuestro Padre le entrego la tierra Adán para ser poblada,  trabajada y protegida, irremediablemnte traía un efecto o consecuencia, como lo fue la muerte sobre Adán y su compañera Eva. Su decisión   los separaba de la presencia de nuestros Padres Celestiales y la tierra no cumpliría el proposito para lo cual fue organiada. De no existir el proceso de redención o rescate, DIOS dejaria de ser  un DIOS. Alma 42:13.   
Fue necesario darle un tiempo de vida antes de que  Adán y a Eva, conocieran la muerte, para que se arrepintieran y a traves de ese arrepentimiento, DIOS estableciera el proceso de Salvación y redención. Para ello era necesario activar la expiación y sacrificio  ofrecidos    voluntariamente por Jehová.

Fue entonces que la MISERICORDIA,  surgió  como ayuda reparadora ante  la expiación propuesta y aceptada por Jehova, de nacer en la tierra como JESÜS de Nazaret, expiar todos nuestros pecados, morir y luego resucitar para restituir la inmortalidad   al genero humano.  Sin embargo para alcanzar la exaltación, es necesario lograr la vida eterna y esta se logra mediante el cumplimiento de leyes que conforman la justicia de DIOS.  La misericordia solo se aplica para todos los que se arrepientan. Todos los que no lo hagan, estarán sometidos a la JUSTICIA y a los efectos y consecuencias que generen irremediablemnte  su incumplimiento. . La misericordia puede actuar y reclamar lo suyo, pero no puede robar a la justicia, sin que exista previamente el arrepentimiento. De allí que la escritura señale que la Misericordía no puede robar a la Justicia.
Las leyes eternas como lo indica su calificativo de eternas, son absolutamente necesarias y de estricta observación y respeto,  para poder recibir LA JUSTICIA DIVINA  y conocer la plenitud del amor que DIOS EL PADRE siente por sus hijos.
El conocimiento alcanzado en cuanto al orden de DIOS, permitira que como seres resucitados, podamos bajar a niveles inferiores de conocimiento para   ministrar y enseñar a nuestros hermanos, pero en el estado de  ignorancia no podremos hacerlo.

Nuestro Padre Celestial hace salir el sol sobre malos y buenos, y hace llover sobre justos e injustos. Señala Mateo 5:45.
Un padre amoroso y justo, entrego mediante su conocimiento omniciente, esos dos elementos vitales para la vida en el planeta, sin distinción de ninguna especie.
Pese a esta incuestionable verdad,   existe mucha confusión entre  los seres humanos, que dudan de ese amor que lo vemos diariamente  manifestado en la creación de este  maravilloso planeta lleno de vida, gracias al profundo significado de esa escritura. Dudamos cuando nos llenamos de necesidades, cuando  somos victimas del sufrimiento, de la desigualdad, de la  injusticia, de accidentes, enfermedades, guerras y hasta por la llegada de la muerte de manera prematura.  Estos hechos que muchas veces no podemos evadir y otros son de necesario cumplimiento, como el caso de la muerte fisica, son producto de la propia  libertad para actuar que tenemos todos los seres humanos  sobre la tierra.   Sin duda nos afectan, agobian,  nos hacen sufrir y  llegamos hasta  negar  la MISERICORDIA, LA JUSTICIA  y   la presencia de DIOS, pese a que no somos creadores del sol, la lluvia , el aire, el ADN, los átomos, moleculas y mucho menos de la tierra que habitamos y que apenas si conocemos de ellos. Además ningún hombre en el estado actua,l es capaz de ensamblar un proyecto de tanto contenido espiritual para desarrollarse a si mismo. Así como sería imposible, la presencia humana sin la existencia de Padres terrenales. Sin embargo dudamos de DIOS y creemos en el hombre.
Esta enorme confusión surge, cuando logicamente  razonamos y evaluamos, en base a nuestro muy limitado conocimiento terrenal. El sistema creación del hombre alejado de DIOS,  nos ha colocado gringolas, para solo ver en una sola direccción.EL DINERO Y EL PODER.
Para suprimir nuestra ignorancia, mejorar y fijar conocimiento, es que se nos ha dado la maravillosa oportunidad de nacer y tomar un cuerpo físico. Hemos nacido, para aprender  precepto tras precepto, línea tras línea. Sinembargo pensamos que  Dios nuestro Padre y su amor por todos nosotros  no existen, y que de ser cierta su existencia,  su amor  debería  ser más comprensivo,  justo y complaciente, ante  la presencia de tantas calamidades,  desigualdades y sufrimientos, que surgen  durante nuestra existencia en este segundo estado terrenal.  Necesidades y calamidades creadas por el hombre incapaz de solucionarlas por si mismos.

Gracias a la revelación moderna y al  conocimiento recibido de otros, puedo escribir  sobre este tema con mayor propiedad, para ayudar al entendimiento de aquellos que viven este conflicto existencial, que los aleja del amor de Dios. Por ello doy gracias a todas esas buenas personas que se tomaron el tiempo de enseñarme para llegar a la verdad y entender la verdadera razón de nuestra existencia.

En la revelación moderna, se nos ha dicho, que LA MISERICORDIA NO PUEDE ROBAR A LA JUSTICIA. Doctrinas y Convenios 54:6. Se entiende como robar, sustraer algo que no nos pertenece. Por lo tanto la justicia divina y todo los elementos contenidos en ella para que pueda ser aplicada de manera sabia, pura, imparcial y con toda transparencia, son de DIOS. Solo a su hijo Jesucristo se le ha delegado el derecho de abogar por nosotros.  (1Juan 2:1). Será  el día de nuestro juicio ante DIOS, cuando Jesucristo presente nuestra solicitud  de reconcialiación  ante el PADRE y avale nuestro firme deseo de vivir en la presencia nuevamente de DIOS, afirmando  y comprobando   que  el JEHOVA y nosotros, hemos  cumplido con la obediencia a las leyes, mandamientos y convenios requeridos, que conocimos y fueron aceptados. Será entonces cuando  la Misericordia de Dios de manifieste como muestra de su infinito amor,  al haber  regresado a su presencia. Será en ese momento que será aplicada su MISERICORDIA  sobre aquellos que han guardado el convenio y observado el mandamiento. (Doctrinas y Convenios 54:6). Será en ese maravilloso reencuentro con nuestro Padre Celestial,  cuando recibiremos  el reino y el  grado de gloria que merezcamos, lo cual nos permitirá pasar a un nuevo estado o plano de existencia y de trabajo en otros mundos o moradas, habienso sido debidamente preparados y probados     
 (Juan 14:2).
La  palabra MISERICORDIA desde el punto de vista espiritual , significa  actitud bondadoza, compasiva, llena de ternura,  para entender  el comportamiento humano,  y las consecuencias que se puedan derivar de su ignorancia durante su periodo de aprendizaje y desarrollo en este estado temporal.  Conciente de esta realidad, demostrando su amor y su justicia, DIOS EL PADRE,  acepto el ofrecimiento de su hijo Jesucristo para asumir como suyas todas   nuestras faltas y pecados. Fue necesario  su sacrificio expiatorio, para  corregir nuestra errada  conducta humana, producto de nuestro alejamiento   de los mandamientos y principios recibidos de DIOS por nuestros antepasados..   
Ante la libertad del hombre para actuar en la tierra y la posibilidad de equivocarse, DIOS EL PADRE también demuestra su amor, cuando nos invita al arrepentimiento y a obtener  el  perdon, cuando fallamos en nuestro estado temporal; pero la  MISERICORDIA que pretendemos o deseamos que DIOS aplique desde nuestro nivel de copnocimiento,   no puede sobrepujar a La JUSTICIA.  En esta última,  se encierran  las leyes eternas  que deben existir,  para que determinados fines y propositos,  claramente definidos en  beneficio de la existencia humana  se cumplan.
Los hechos ocurren producto de las  leyes que rigen nuestra existencia tanto espiritual como fisica y porque el hombre tiene el poder fundamental en el plan de DIOS, de decidir su camino con su  libre albedrio. De Adán el primer hombre, heredamos sus genes,  el poder para razonar y de decidir, que fue  recibido y estimulado por Dios el Padre en el Paraiso Terrenal. Por lo tanto a los sagrados y sabios propositos de DIOS, no se les puede restar  valor, razón de ser, o modificar su existencia. Sencillamente existen  y siempre estaremos sujetos a recibir SUS BENDICIONES, cuando las cumplimos fielmente, o sus CONDENACIÓNES  o efecto contrario, cuando dejamos de cumplirlas.
 Cuando recibimos una bendición de DIOS, es porque se obedece aquella ley en la cual se basa. (Doctrinas y Convenios 130:20-21).  Por lo tanto  las leyes  existen de manera eterna y  no  pueden ser  minimizarlas  para sacar algún provecho  personal de ellas.  Ninguna ley  eterna, puede ser invalidada o modificada por el hombre.

Se piensa erroneamente que DIOS puede impedir   que ocurran hechos que pueden generar dolor, conflictos,  penas y sufrimiento. Sería atentar contra el albedrio y la libertad para actuar que ha recibido el hombre, así como contra  las propias leyes y las consecuencias que estas puedan generar. No existe el caos ni la anarquia como se pretende vender por algunos cientificos en el Universo. Todo tiene una causa y un efecto, que aun no podemos entender, tratando de razonar con serias limitantes desde un minisculo planeta en la inmensidad del espacio. La oposición es necesario  para que el hombre  sea su propio agente. Doctrinas y Convenios 29:39.

 El hombre necesariamente debe siempre decidir en base al conocimiento alcanzado sin ser compelido o mandado,  de lo contrario seríamos   robot con un destino prefijado por un ser superior, que nos privaría de la libertad. Este plan se presento en el Concilio De Los Cielos y no fue aceptado por ninguna de nosotros. Sin embargo en la oscuridad que existe, trabajamos en el y lo potenciamos con nuestros actos.
  
Los mandamientos de DIOS y los efectos o consecuencias que estos puedan generar, no se pueden cambiar o modificar para satisfacer los deseos y conducta de la gente, Dijo el Apostol  Dallin Oaks en Noviembre del 2009 en la Conferencia General de la Iglesia de Jesucristo.
El amor de Dios no sustituye sus leyes y mandamientos, porque sería disminuir sus sagrados y sabios propositos establecidos para que todos sus hijos puedan regresar y participar de  su gloria, reservada para  los que sean fieles, obedezcan y  guarden los  convenios. Todo su amor está allí y solo dependerá de nosotros disfrutarlo plenamente, con nuestras familias, que hayamos organizado en la tierra.  El amor de DIOS no es excluyente, por el contrario es conformador e integrador de familias eternas, pero respetando la libertad de sus hijos. El amor  de DIOS, siempre estará allí esperando por nosotros. No existen en su plan, la compra de indulgencias, de calificaciones, trafico de influencias, otorgamiento de titulos falsos comprados o el otorgamiento de premios y reconocimientos sin hacer meritos por ellos. Su amor y su justicia son perfectos, sencillamente porque El es un ser perfecto. La imperfección  nuestra, no puede pretender exigir nada ni cuestionar  la perfecciónde DIOS, que solo se puede entender mediante el estudio y el conocimiento de sus escrituras, que estan alli como instrumentos de consulta y consejo, como el buen Padre que envia a sus hijos de viaje.

El hombre trata de imponer sus propias leyes y ya vemos los resultados obtenidos.
Los  principios y leyes que rigen nuestra conducta, nos fueron presentados,  en la preexistencia y fueron aceptados por todos los que  asistimos al concilio de los cielos. Allí aceptamos el plan de mejoramiento espiritual, el tomar un cuerpo, actuar en completa libertad y decidimos seguir a Jehová como nuestro maestro y guia en la dificil prueba. Mal podría Dios violar esos acuerdos y convenios sellados antes de venir a la tierra, de manera unilateral o complaciente, como suele ocurrir con nuestros padres terrenales, ante solicitudes muy personales propias de nuestra ignorancia. De hecho, nos estamos rigiendo por leyes de hombres que han llenado a este planeta de misería, desigualdad, injusticia, destrucción de la vida  y terrible contaminación.  De alguna u otra manera somos actores al daño humano y planetario, al apoyarlos y aceptar sus iconos y liderazgo, pese a los avisos de alerta que existen en los manuales de intrucciones o escrituras que nuestro PADRE CELESTIAL Y JESURISTO nos han dejado.

Siendo el amor de Dios perfecto, no puede estar sujeto a la misericordia como la entendemos  los humanos. Ello  sería aceptar o tolerar en cualquier nivel o grado,   la desobediencia  al conocimiento recibido, o faltar   a las mutuas promesas de cumplimiento que realizamos ante nuestro Padre, antes de partir de su lado.
Aplicar la misericordia como la entendemos los humanos,   impediría que  el proposito  de la leyes que regulan nuestros  convenios,  sea cumplida para el beneficio de todos por igual. La justicia dejaría de existir y reinaria la anarquia y el caos en los cielos, al igual que existe en la tierra.

Es necesario, aprender,, comprender,  entender, aceptar y practicar leyes menores para poder optar a otras superiores. Ese fue la primera gran enseñanza a nuestro Padre Adán, cuando estaba en el paraiso terrenal y habia recibido su cuerpo fisico como su instrumento para proteger y trabajar  para su desarrollo el planeta recibido como casa.
El evangelio es el único mapa a seguir, que tiene todas las señales necesarias dejadas por el gran maestro Jesús, para no perdernos en medio de este laberinto humano cuya unica creación se encuentra  llena de conflictos, calamidades y frustraciones, sin que existan soluciones. (Apocalipsis de San Juan)

Nota:
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